Incentivo fiscal para los compuestos orgánicos volátiles (COV)
Los compuestos orgánicos volátiles (COV) se utilizan como disolventes en muchos sectores y están contenidos en diversos productos, como en pinturas, barnices y algunos detergentes. Emitidas al aire, estas sustancias contribuyen, junto con el óxido de nitrógeno, a la formación de elevadas concentraciones de ozono troposférico (smog estival). El impuesto sobre los COV se recauda desde el 1 de enero de 2000 y, como instrumento económico para la protección del medio ambiente, ofrece un incentivo financiero para reducir las emisiones de COV.